(function() { (function(){function b(g){this.t={};this.tick=function(h,m,f){var n=void 0!=f?f:(new Date).getTime();this.t[h]=[n,m];if(void 0==f)try{window.console.timeStamp("CSI/"+h)}catch(q){}};this.getStartTickTime=function(){return this.t.start[0]};this.tick("start",null,g)}var a;if(window.performance)var e=(a=window.performance.timing)&&a.responseStart;var p=0=c&&(window.jstiming.srt=e-c)}if(a){var d=window.jstiming.load; 0=c&&(d.tick("_wtsrt",void 0,c),d.tick("wtsrt_","_wtsrt",e),d.tick("tbsd_","wtsrt_"))}try{a=null,window.chrome&&window.chrome.csi&&(a=Math.floor(window.chrome.csi().pageT),d&&0=b&&window.jstiming.load.tick("aft")};var k=!1;function l(){k||(k=!0,window.jstiming.load.tick("firstScrollTime"))}window.addEventListener?window.addEventListener("scroll",l,!1):window.attachEvent("onscroll",l); })(); El Eterno Andar
sábado, enero 6
San Felipe y Santiago
Mientras camino alguna de sus destruidas veredas, tratando de acertarle el pie a cada huérfana baldosa, pienso en el extraño hueco que es Montevideo actualmente: un desierto de ideas que perdió su identidad.

En el quiosco de la esquina los diarios son los mismos de ayer, si algo nuevo e interesante ocurrió quedará diluido y perdido en alguna hoja treinta y tres, escondiéndose de los pesados titulares amarillistas que lo abruman. Esos títulos que narran todos los días nuestra monótona rutina. La de una ciudad que a veces respira, se olvida de lo que es y respira, se olvida de lo que es y suspira recordando algunos tiempos mejores.

Pasa que el verano no es una buena época para pensar en gris, ese color calle con el que pintaría siempre su nombre. Gris es cielo de otoño, es fotografía con segunda, es reflexión como esta. No es un color que haga juego con nuestras ramblas relucientes o con las nuevas bicicletas que dejaron los reyes.

Así que supongo que no voy a insistir mucho con eso, al menos hoy, al menos mientras el verano me siga distrayendo con su luz. Sigo de todas formas sin saber cuál debería ser nuestra identidad y me preocupa. Porque si no lo solucionamos rápido las maestras van a seguir enseñando a bailar el pericón, una música que me identifica tanto y tan bien como la country o la polka.

Montevideo te quiero pero no sé dónde estás.



Salgo en tu busca.